jueves, 20 de diciembre de 2007

LAS CONCLUSIONES

•Huanchaco, tradicional caleta de pescadores, cuyos moradores hasta la actualidad conservan muchas de las costumbres de sus ancestros mochicas; tal es así que las diminutas embarcaciones llamadas "caballitos" de totora siguen siendo la principal herramienta de trabajo del actual pescador huanchaquero.
•En la actualidad, Huanchaco se ha constituido en uno de los balnearios más bellos del litoral peruano. La belleza de sus playas, y sus formidables olas siguen atrayendo a turistas de todo el mundo.

SU ARTESANIA

•La artesanía es tan antigua como Huanchaco y como todo aquí, tiene mucho encanto.
•El visitante la encuentra recorriendo pequeños establecimientos, ubicados en un acogedor centro comercial, junto al mar, que poseen los propios artistas.
•Reflejado el mar, los caballitos de totora, la gente de Huanchaco y mucho de la magia que encierran las antiguas tradiciones de esta tierra, desde las ancestrales épocas de la cultura Chimú.
•Entusiasman las joyas deslumbrantes y muy baratas, al igual que caballitos de totora de todos los tamaños y materiales.

SU COMIDA

•Sabrosa, exclusiva, en algunos casos de tradición milenaria, nutritiva y muy diversificada es la comida de huanchaco. Preparada en base a pescados, mariscos, algas marinas, aves, ganado o productos de la tierra, se contabilizan en más de un centenar los potajes típicos. Los nombres de los platos de comida son casi siempre originales y hasta nativos y sus preparaciones llenas del secreto de la buena cocinera. La gastronomía de huanchaco está compuesta por raíces pre-incas, incas, coloniales hispánicas,. Hoy en día los chef’s nacionales están siendo partícipe de una reivindicación histórica, al innovar en comidas Novoandinas o Nikkeis. De esta manera la cocina peruana se mantendrá un lugar de privilegio entre las mejores cocinas del mundo. La gastronomía huanchaquera es el resultado de una maravillosa y rica mezcla de culturas y comidas

LOS CABALLITOS DE TOTORA

•El caballito de totora es una milenaria embarcación utilizada desde la época preincaica, por los pescadores artesanales del litoral norte del Perú.
•Los investigadores estiman que su uso data de por lo menos el año 100 a.C., porque existen numerosas evidencias arqueológicas encontradas en las antiguas culturas, como Salinar, Gallinazo, Mochica y Chimú, descubiertas en trabajos de rescate arqueológico.
•Los elementos recuperados en excavaciones demuestran que este singular caballito de totora, se ha mantenido y preservado, idéntico al usado por los antiguos peruanos.
•Y justamente el único lugar de América donde el caballito de totora se conserva idéntico en su construcción, materiales y utilización en cotidianas tareas de pesca.
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DESCRIPCION DE HUANCHACO




Es una pequeña bahía vigilada desde un farallón por una imponente iglesia colonial, con un fascinante y centenario muelle que reta complaciente al suave oleaje.

HUANCHACO COTIDIANO

•Aquí se conserva el uso cotidiano del caballito de totora, la más antigua nave marítima de América y los pescadores locales mantienen los usos y costumbres empleados desde el inicio de la historia del hombre en esta parte del Pacífico sur.

•El espectáculo de los caballitos saliendo a la mar, como verdaderos corceles acuáticos, es inolvidable. El mar levanta sus tibias olas y cobija a bañistas y surfistas que surcan las aguas, junto a las milencon el presente moderno.
•arias naves de los chimús y de los incas, con una fraternidad que recrea el encuentro cordial de la historia antigua

jueves, 15 de noviembre de 2007

VESTIMENTA DE HUANCHACO


El hombre usa pantalones de dril con basta muy abierta, camisa con manga corta sin cuello y sin calzado. Las mujeres usan varias enaguas y faldas amplias llevando blusas sueltas con algunos adornos y mangas largas con puños anchos, que facilitan las labores caseras y no traslucen sus formas .Tienen modelos llanos y sencillos
.
Para las fiestas el hombre utiliza sombrero negro o azul con saco y pantalón del mismo color.
En las mujeres lo más importante a la vez que constituye lujo de festividad son las alhajas, consistentes en hermosos y grandes aretes, que muchas veces rozan sus hombros, así como preciosas sortijas. Estas alhajas se transmiten como herencia obligada de familia de generación en generación

UBICACION DE HUANCHACO


El hermoso balneario de Huanchaco se ubica a 16 Km. de la ciudad de Trujillo . caleta pintoresca de ascendencia chimu . Perviven los caballitos de totora milenarios y cincelares que utiliza la gente del lugar para faenas de pesca.

HISTORIA DE HUANCHACO

Esta es una breve historia sobre la manera en que el mar genera un modo de vida, que a su vez es conservado y recreado en la memoria colectiva de un viejo pueblo de pescadores. Es la memoria del pueblo de Huanchaco, situado en la costa norte peruana, distante 11 Km al noroeste de la ciudad de Trujillo, capital provincial, y 560 Km de la ciudad de Lima, capital nacional. Ubicado a la margen derecha del río Moche, principal afluente hidrológico de la zona, fue, con certeza, puerto principal del lugar en la época Chimú (1100 d.c.) y seguramente desde los años de la civilización Moche (200 d.c.). Más tarde, fue el puerto de Trujillo, cabeza de región en el período colonial, hasta 1870, ya en la república.
Huanchaco se asienta en una bahía, bajo una terraza, al pie suroeste del cerro Campana, en una zona que tiene una larga data de presencia humana. Los arqueólogos han reportado evidencias con antigüedad de 5,000 años1. Los cronistas informan que el lugar era cabecera de playa y puerto de los antiguos hombres de la cultura Chimú, condición que mantuvo durante el corto predominio inca (1470 a 1534)2. Desde la irrupción española en el territorio andino hasta 1870, continuó siendo el puerto principal de Trujillo, ciudad influyente en la vida del norte peruano. Luego de ese año cerró sus actividades portuarias “por su tasca o barra peligrosa”3 y dos años después comenzó a operar el puerto de Salaverry, en el lado opuesto, sobre la margen izquierda del río Moche.
Dos décadas más tarde, al finalizar el siglo XIX, el filántropo ítalo peruano Víctor Larco Herrera construyó un moderno muelle4 -y reinició las actividades portuarias- para exclusividad del embarque de azúcar de su poderosa Negociación Roma, ubicada en el vecino valle de Chicama, una de las zonas más importantes de la producción azucarera en el país. Inauguró de esa manera una época de bonanza que concluyó en la década del veinte del siguiente siglo5, sin que pudiera recuperarse en los años del boom pesquero -1950 a 1960-. La fisonomía de caleta de pescadores que heredó desde tiempos coloniales y acaso Moche Chimú (prehispánicos) no se alteró, no obstante la intensa actividad portuaria. Lo cierto es que a fines de los cincuenta e inicios de los sesenta, con el proceso de urbanización moderna, se inició una lenta transformación de la vida local, para hacia los ochenta convertirse ya en balneario y dejar atrás la vida de caleta de pescadores. A pesar de este cambio, es posible todavía advertir en la población los rasgos del pensar y sentir de esa herencia cultural, recreada desde su visión y sueños como ha ocurrido con las poblaciones nacionales que llevan tras de sí una larga tradición cultural e histórica.
El texto presenta -desde una mirada antropológica- una breve aproximación a la historia y cultura del pueblo pescador de Huanchaco. No es necesariamente una reconstrucción en estricto, es el recuerdo de sus habitantes y de los contemporáneos que vivieron o visitaron el lugar; un texto que organiza un discurso de representación sobre el pasado y el presente. Una apropiación de su historia desde las márgenes de la memoria oral fundamentalmente. Apropiación que actualiza marcas para los días venideros, que es acaso la intencionalidad de este discurso marino.
Este trabajo forma parte de un trabajo de investigación que realicé para obtener el bachillerato en Antropología Social en la Universidad Nacional de Trujillo6, y ha sido revisado y preparado especialmente para esta revista. He realizado algunas anotaciones menudas con el propósito de contextualizar y facilitar la comprensión del lugar y la historia que organiza el relato. Se detiene principalmente en la vida local asociada a la pesca artesanal del caballito de totora y a cómo el mar ha definido un modo de vida propio, habida cuenta la larga continuidad de los pobladores en la zona.